Introducción
Uno de los primeros resultados en la vida de una persona al nacer de nuevo, es un vivo deseo de hacerle conocer a otros lo que está experimentando en su nueva vida en Cristo. Esto es lo que la Biblia llama "testificar", o "dar testimonio" o "ser testigos" de Cristo. Y es una de las pruebas de una conversión genuina a Cristo.
Alguien ha dicho que testificar es: "Un mendigo diciéndole a otro mendigo dónde conseguir pan". Es el deseo de hacerle conocer a otros el gozo de haber encontrado el Pan de Vida, Jesucristo, quien ha saciado la necesidad más profunda de nuestra alma. Es el deseo de que otros experimenten el mismo gozo y bendición.
Versículos Útiles Para Predicar
Juan 3:16.
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
Juan 3:17.
Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.
Juan 3:18.
El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.
Juan 3:19.
Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas.
1 Timoteo 1:15.
Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.
Hechos 10:43.
De éste dan testimonio todos los profetas, que todos los que en él creyeren, recibirán perdón de pecados por su nombre.
Efesios 2:1.
Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados.
Romanos 6:23.
Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro.
1 Pedro 2.9.
Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable.
Romanos 3:23.
Por cuanto todos pecaron, y estan destituidos de la gloria de Dios.
Romanos 10:9.
Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, seras salvo.
Juan 1: 12.
Mas a todos los que le recibieron (a Cristo), a los que creen en su nombre, les dio potestad de hacerse hijos de Dios.
Efesios 2:8-9.
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadic se gloríe.
Romanos 5:8.
Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Mateo 28:18-20.
Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizandolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñandoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.
Juan 8:14.
Respondió Jesús y les dijo: Aunque yo doy testimonio acerca de mí mismo, mi testimonio es verdadero, porque sé de dónde he venido y a dónde voy; pero vosotros no sabéis de dónde vengo, ni a dónde voy.
CÓMO PRESENTAR EL EVANGELIO
Lo que sigue es sólo una orientación fundamental para ayudarte a testificar a tus familiares y amigos y ser un ganador de almas, a la vez que podrás luego enseñar a otros para que hagan lo mismo.
A. CONSIDERACIONES PREVIAS
Recuerda que tu responsabilidad es sólo presentar el mensaje de salvación de la mejor manera posible. No es tu tarea o responsabilidad convertir a la gente. La salvación de una persona es algo sobrenatural, que requiere del poder sobrenatural de Dios (Zacarías 4.6.), y no depende de la elocuencia o la capacidad humanas.
Aunque vas a aprender algunos principios y pautas para testificar, y debes hablar del Señor en toda oportunidad que se te presente, también debes DEPENDER DE LA DIRECCION DEL ESPÍRITU SANTO para determinar la persona, el momento apropiado y las palabras apropiadas para que tu testimonio tenga la mayor efectividad.
ORA de manera definida por la obra del Espíritu Santo sobre la persona antes, durante y después de testificarle.
hazlo con amor y paciencia.
¡NUNCA DISCUTAS! Las discusiones nunca ayudan a ganar a las personas sino a alejarlas de Cristo. Podrás ganar la discusión, pero habrás perdido un alma.
NO TE DESANIMES si algunos no aceptan tu testimonio, o no se convierten. Otros lo haran. Sigue orando e insiste. No te están rechazando a ti, sino a Cristo. Recuerda la oración de Jesús en favor de los que le crucificaban: "Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen".
B. CÓMO COMENZAR
INTERESATE POR LA VIDA DE LA PERSONA a quíen testificas. Quizás tengas que comenzar hablando de temas generales o seculares.
INTRODUCE GRADUALMENTE EL TEMA ESPIRITUAL, de una manera natural y no forzada. Si notas que la persona no quiere entrar en el tema, no insistas. Ora que Dios te de otra oportunidad.
DA TU TESTIMONIO PERSONAL en forma breve, recalcando los aspectos positivos, y dando siempre el primer lugar al Señor.
C. LAS DOS PREGUNTAS DE DIAGNOSTICO
Si no conoces a la persona, estas dos preguntas te ayudardn a descubrir con mucha probabilidad su verdadera condición espiritual. Si la conoces y sabes que no ha nacido de nuevo, te pueden ayudar a entrar en el tema. Puedes variar las palabras, pero manteniendo la idea principal.
1-. Si murieras hoy, ¿estás seguro(a) de que irías al cielo?
Si responde que no está seguro(a), puedes contarle cómo tú tampoco lo estabas, hasta que descubriste por la Biblia que sí era posible estar seguro.
Si te responde que si está seguro, no lo contradigas. Entonces añade la siguiente pregunta
2-. Supongamos que mueres esta noche y tienes que presentarte ante Dios. Si Él te preguntará: "¿Por qué debo permitirte entrar al cielo?", ¿qué le responderías?
Si da cualquier otra razón que no sea la fe en la obra de Cristo en la cruz, sabes que probablemente no ha nacido de nuevo. Es muy común que estén confiando en sus buenas obras, o en que no hacen daño a nadie.
Sin necesidad de decirle que está equivocado(a), y reconociendo lo importante que es todo esto, puedes comenzar a presentarle el plan de salvación, con todo el entusiasmo que el Espiritu Santo ponga en tu corazón.
D. UN BOSQUEJO DEL EVANGELIO
Aprende de memoria este bosquejo, pero considéralo siempre sólo como una ayuda. Mantente flexible para variarlo según te dirija el Espíritu Santo, y de acuerdo con el desarrollo del dialogo y a las reacciones de la persona.
De preferencia usa la Biblia, haciendo que la persona lea los versículos por ella misma. Trata de añadir otros versículos similares de tu propia "cosecha", los que haran tu testimonio más auténtico, personal y variado.
EL BOSQUEJO
Dios ama al ser humano
Juan 3:16: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna".
Pero el hombre es pecador
Romanos 3:23: "Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios".
Y el pecado tiene un castigo
Romanos 6:23: "Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro".
Pero Cristo sufrió nuestro castigo
Romanos 5:8: "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros".
Por eso nuestra salvación es gratuita
Efesios 2:8-9: "Porque por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe".
Debemos recibir a Cristo como nuestro Salvador
Juan 1: 12: "Mas a todos los que le recibieron (a Cristo), a los que creen en su nombre, les dio potestad de hacerse hijos de Dios."
reconocerlo como el Señor de nuestra vida
Romanos 10:9: "Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo".
E. GUIANDOLO A LA DECISIÓN
Este es el momento culminante de la presentación del Evangelio. Debe hacerse en oración, pidiendo que el Espíritu Santo obre en el corazón de la persona. Las preguntas que siguen son sólo modelos o ejemplos.
La pregunta calificadora
- ¿Has entendido bien lo que Cristo ha hecho por ti?"
- ¿Te das cuenta de que Cristo quiere entrar en tu vida como tu Salvador y Señor; perdonar todos tus pecados y darte vida eterna?
Si la respuesta es afirmativa, prosigue a
La pregunta de decisión
- "¿Quieres confiar solamente en Cristo para el perdón de tus pecados y para tu salvación?"
- "¿Estás dispuesto a arrepentirte de tus pecados y seguir a Cristo?"
- "¿Quieres recibir a Cristo como tu Salvador y como el Señor de tu vida?"
Si la respuesta es afirmativa, pídele que repita contigo.
La oración de decisión, con palabras como éstas:
"Señor Jesús, reconozco que soy un pecador(a), y que necesito tu perdón. Me arrepiento de mis pecados. Creo que pagaste por ellos al morir en mi lugar, pero que luego resucitaste y que vives para siempre. Te invito a entrar en mi vida como mi Salvador personal. Te reconozco como el Señor de mi vida. Recibo la vida eterna que me ofreces. Gracias, Señor." , Por favor usar esta oración solo de modelo y deja al Espiritu Santo que te use en oración; no conviertas esto en un rezo.
Termina orando por la persona.
Dale confianza y reafirma la seguridad del perdón de sus pecados y de la vida eterna, dando gracias y la gloria a Dios!.
Predicando El Evangelio
lunes, 7 de enero de 2008
Publicado por negrusa en 15:31
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1 comentarios:
Una guía muy util que todos debemos tener en cuenta!
Bendiciones y sigue adelante compartiendo información interesante para la gloria de Dios.
Paz de Cristo!!
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